Luego de haber subido unas cuantas escaleras y calles, bajo el sol quemante, llegamos al castillo.
Nomás entrando, hay un
hermoso parque y la sombra se agradece.
Nos
recibe un fiero Afonso I de bronce, idéntico al de Guimarães, junto con su séquito de patos, gansos y pavos reales que pasean por allí, indiferentes a las multitudes de turistas.
Si
bien hubo en la zona fenicios, griegos, cartagineses, romanos, hay un
castillo bien armado desde los visigodos, luego ampliado por los
moros. Dada su ubicación estratégica, cristianos y musulmanes se
alternaron varias veces en su dominio, hasta que la ocupación por
Afonso se hizo definitiva. Creció, hubo palacio, hubo cortes... que
luego se fueron a zonas más elegantes. Sucesivos terremotos fueron
destruyendo partes y para el comienzo del siglo 20, cuando se lo
declaró Monumento Nacional, no quedaba casi nada. Se hicieron grandes
esfuerzos en los 40s y 90s por restaurarlo, y también excavaciones
que han ido descubriendo elementos de las culturas que han ido
pasando por el lugar. Estos objetos están en un pequeño e
interesante museo allí mismo.
Dentro
del recinto, existe un minúsculo barrio llamado Santa Cruz do
Castelo, y para los que quieran restaurarse hay un café y un restaurante (Casa do Leão) bastante exclusivo.
Castillo de San Jorge, Lisboa, Portugal |
Como
castillo, digamos que hay otros mejores y mejor conservados.
Para
mí lo mejor del Castelo es su ubicación, en la cima de la
colina más elevada.
Las vistas sobre la ciudad y el río desde la antigua plaza de armas son espectaculares, por lo que la visita es im-per-di-ble.
También hay una exhibición multimedia, que preferimos pasar de largo, aunque tiene buenos comentarios.
Las vistas sobre la ciudad y el río desde la antigua plaza de armas son espectaculares, por lo que la visita es im-per-di-ble.
Vista desde el Castillo. Lisboa, Portugal |
También hay una exhibición multimedia, que preferimos pasar de largo, aunque tiene buenos comentarios.
Como
he recibido alguna suave observación acerca de que últimamente estaba
poniendo demasiado fado, doy aquí mis 3 razones:
- Como dije antes, trato de que ilustre algo, o ponga en ambiente el texto.
- Dice el (cuándo no) fado, 'Mais cuando Lisboa canta, canta o fado con certeza'.
- Perche me piacce.
Lo cual no quiere decir que no esté atento a las observaciones.
Por eso, hoy ilustro con un video sobre una composición de Dinis I, rey de Portugal, de circa 1300: 'Non chegou madr' meu amigo'.
Por eso, hoy ilustro con un video sobre una composición de Dinis I, rey de Portugal, de circa 1300: 'Non chegou madr' meu amigo'.
Aunque algunas de las fotos remiten a otros castillos de la época (ej. Óbidos, que ya hemos visto)... seguramente fue escuchado en este mismísimo lugar... y
unas cuantas veces!
Lo
supongo porque siempre las cortes aplauden a rabiar y piden bises
cuando habla, canta, baila o toca el rey de turno. Si lo sabremos
nosotros...
Video
D. Dinis I, circa 1300
En la próxima entrada, ya vamos cuesta abajo... del castillo iremos descendiendo y nos pasearemos por otros hermosos miradores, la catedral y el antiquísimo barrio de Alfama.
Enlaces:
https://es.wikipedia.org/wiki/Castillo_de_San_Jorge_de_Lisboa
http://www.planetware.com/lisbon/mouraria-p-lisb-mour.htm
http://www.planetware.com/lisbon/mouraria-p-lisb-mour.htm
Gracias nuevamente por tus palabras estimado Enrique. Y está re bueno el post del castillo de Lisboa.
ResponderEliminarBuenos y muchos viajes para vos tb.
p.